miércoles, 22 de marzo de 2017

“Una Cuaresma Joven”


¿Qué puedo hacer para vivir  la cuaresma de un modo auténtico?
Queridos amigos y amigas jóvenes es una alegría poder compartir con ustedes acerca de este tiempo tan hermoso cargado de elementos que nos ayudan a vivir el misterio de la pasión y muerte salvadora de nuestro Señor Jesucristo, y, que ciertamente tiene su culmen la noche Santa del sábado de Gloria y se prolonga a toda la cincuentena pascual. Introduzcámonos en este artículo y hagamos este recorrido cuaresmal.     

¿40 días? La Cuaresma es un tiempo litúrgico que nos prepara, a las celebraciones anuales de los misterios de la Pasión Muerte y Resurrección de nuestro Señor “la Pascua”,  es un tiempo especial para revisar nuestro Proceso de conversión, mejorar nuestra oración y con la ayuda de las prácticas que la Iglesia orienta trascender a realidades significativas en la vida del creyente y de la comunidad. La Cuaresma es un nuevo comienzo, un camino que nos lleva a un destino seguro; la Pascua de Resurrección (S.S. Francisco mensaje para la cuaresma 2017). Es tiempo para arrepentirnos de nuestros pecados y de cambiar algo de nosotros para ser mejores y poder vivir más cerca de Cristo (¿Qué es la cuaresma? Aciprensa). Es necesario decir que también es un momento especial para encontrarnos con la misericordia infinita de  Dios, “este es el día del Señor, este es el tiempo de la misericordia” (Himno Vísperas, Cuaresma).

Cabe entonces  preguntarnos ¿A qué nos invita realmente la cuaresma?


La liturgia de la Palabra del miércoles de ceniza y Cada domingo nos irá marcando el camino de cómo vivir con autenticidad este tiempo, rasgarse el corazón y no las vestiduras (Joel 2, 12-18), la oración, el ayuno y la limosna (Mt, 6 1-6. 16-18), de aquí que es importante encarnar la Palabra día a día, así el primer Domingo nos presentará a Jesús que vence la tentación (Mt 4, 1-11) el segundo nos presenta un anticipo de la Resurrección con el episodio de la Transfiguración (Mt, 17, 1-9), así el tercero el hermoso diálogo con la Samaritana al que la mujer responde “Señor dame de esa agua” (Jn, 4, 5-42),  el cuarto, Jesús  que hace le hace ver la luz  (Jn,  9, 1-41) y finaliza diciendo que él es la Resurrección y la vida (Jn, 11, 1-45).

Un modo especial de vivirlo siendo Joven. Este es un tiempo especial para re encontrarnos con el otro, reconociendo con gratitud su valor (S.S. Francisco Mensaje para la Cuaresma 2017), es por tanto un momento especial para  retomar  la fraternidad, descubriendo a Dios en la liturgia, pero también en cada creyente, de un modo real en las obras de misericordia, cuaresma es justo redescubrir el rostro sufriente de Jesucristo en los marginados, los excluidos, los miserables, los relegados sociales, los abandonados, y los Jóvenes sienten un especial modo de dar la vida (DA # 443) de ahí que el ayuno al que se nos invita no es la privación egoísta lo que tenemos, sino una invitación imperativa a compartir no solo el alimento o lo material sino aún más, se comparte la vida, la amistad el amor, la bondad de modo que se cumpla aquel ideal  de la Civilización del amor “Creemos que los Cristos crucificados de América Latina se levantarán resucitados  y gloriosos por la solidaridad entre nuestros pueblos” y esos valores de esta nueva civilización es responsabilidad nuestra promoverlos, construirlos cada día, cada momento, en cada situación de pobreza, no solo material sino aquellas carencias, dificultades y debilidades para que seamos nosotros los que fortalezcamos al débil, llenemos esos vacíos, y demos aliento a continuar.

Vivamos pues esta cuaresma con espíritu renovado con disposición de redescubrir en el otro la belleza, encontrando a Jesús sobre todo en el que sufre, en el triste, en el olvidado. Ojalá que cada grupo Juvenil, cada joven se convierta en promotor de este ideal.

Alabado Sea Jesucristo.
Jeffrey Kennedy Zúniga Incer